Cómo vivir bien con diabetes tipo 2: Cuatro claves para controlarla

· Un buen control de la glucosa ayuda a prevenir problemas cardiacos, renales y de visión.

 

En el Perú, más de 1.3 millones de personas entre los 20 y 79 años viven con diabetes tipo 2. Y aunque muchos lo ven como una sentencia, hoy se sabe que la enfermedad puede controlarse con hábitos sencillos y un tratamiento adecuado.

“Tener diabetes ya no es sinónimo de fatalidad. Si el paciente sigue un plan básico de autocuidado, puede llevar una vida normal, activa y saludable”, afirma la Dra. Diana Odar, endocrinóloga de la Clínica San Pablo Trujillo. Para lograrlo, señala cuatro claves fundamentales:

 

1.  Alimentación saludable

Evitar los azúcares refinados es clave, ya que fomentan el acúmulo de grasa, incluso en órganos como el hígado, y aumentan el riesgo de hígado graso y enfermedades cardiovasculares.

"Una dieta balanceada, con suficiente proteína y fibra, adaptada a la condición de cada paciente es esencial para un buen control y prevención de complicaciones", señala la especialista.

 

2.      Actividad física

El ejercicio reduce la grasa acumulada, mejora la sensibilidad a la insulina, disminuye la inflamación y ayuda a perder peso, por lo que recomienda entre 150 y 300 minutos semanales de actividad moderada.

 

3.      Tratamiento farmacológico

Varía según las comorbilidades y el riesgo cardiovascular de cada paciente. En algunos casos bastará con fármacos orales; en otros, será necesario combinar hipoglicemiantes, sin descuidar el control de la hipertensión y la dislipidemia.

 

4.      Uso de insulina, si es necesario

No todos los pacientes la necesitan, pero en algunos casos es clave para lograr un buen control metabólico, sobre todo cuando los fármacos orales no son suficientes o están contraindicados.

Durante años, la diabetes tipo 2 puede avanzar sin dar señales claras. Por eso, si hay antecedentes familiares, obesidad o síntomas como sed excesiva, fatiga o visión borrosa, hacerse un chequeo y acudir al especialista es clave. “Un diagnóstico a tiempo puede cambiarlo todo. No se automediquen”, concluyó la especialista.