En un escenario donde el cambio climático acelera su impacto, la
arquitectura juega un papel fundamental para enfrentar la crisis,
posicionándose como una disciplina estratégica para mitigar los efectos del
calentamiento global. Desde edificaciones que generan su propia energía, hasta
materiales innovadores que reducen la huella de carbono, el diseño
arquitectónico está evolucionando para responder a la urgencia ambiental.
En esa línea, los arquitectos vienen implementando diversas estrategias
que van más allá de la simple construcción: la sostenibilidad ya no es una
opción, sino una necesidad. A continuación, Cristina Dreifuss, decana de la
Facultad de Arquitectura y Diseño de la Universidad Privada del Norte (UPN),
comparte las siguientes claves de la arquitectura sostenible frente a la lucha
contra el cambio climático:
- Conciencia ambiental: los espacios urbanos deben concebirse
desde un enfoque integral en el que el diseño, el uso de vegetación nativa
abundante, las consideraciones de transporte público integrado, ecológico
y eficiente, son parte de la solución. No se trata de construcciones
aisladas, sino de comprender la importancia de que cada aspecto conviva de
manera armónica.
- Soluciones sostenibles: se refleja en la búsqueda de la
arquitectura contemporánea por incorporar energías renovables en entornos
urbanos. Esto se materializa mediante la instalación de paneles solares en
fachadas y cubiertas, el diseño de edificios con capacidad de
autogeneración energética y la implementación de arquitectura bioclimática
que aproveche naturalmente la energía solar y eólica.
- Materiales accesibles y eficientes: para implementar dichas estrategias, es
importante utilizar los materiales adecuados. Entre ellos, destaca el
adobe tecnológicamente mejorado, el bambú tratado, la piedra local y
maderas certificadas, las cuales representan opciones viables que combinan
sostenibilidad y eficiencia climática. Además, también existen materiales
emergentes que vienen transformando la industria, como ladrillos
fabricados con plástico reciclado; o avances tecnológicos para
construcciones con aislamiento inteligente, como los cristales
termocrómicos, que regulan la temperatura según la radiación solar.
- Formación de futuros profesionales: actualmente las universidades vienen
respondiendo a estos desafíos mediante la transformación de los programas
de arquitectura, incorporando la sostenibilidad en la malla curricular,
desarrollando prácticas con enfoque en resiliencia climática, y
estableciendo conexiones con comunidades vulnerables con la finalidad de
fomentar la investigación en arquitectura adaptativa y promover la
cooperación internacional en estudios climáticos.
"La arquitectura no solo debe responder a
las necesidades estéticas y funcionales, sino que también tiene la
responsabilidad de diseñar con conciencia ambiental. Esto implica crear
edificios que sean energéticamente eficientes, utilizando sistemas pasivos de
climatización que minimicen el consumo energético; diseñar infraestructuras
resilientes capaces de adaptarse a condiciones climáticas cambiantes y generar
espacios que integren principios de sostenibilidad desde su concepción
inicial.", advierte
Cristina Dreifuss, decana de la Facultad de Arquitectura y Diseño de la
Universidad Privada del Norte (UPN).
En ese sentido, la formación de futuros arquitectos con enfoque
sostenible cobra mayor relevancia, siendo importante que puedan llevar la
teoría a la práctica fuera de las aulas. Por ejemplo, Espacios A+ de la UPN es
una iniciativa de responsabilidad social que diseña y ejecuta propuestas para
la recuperación de espacios en estado de abandono o que carecen de un entorno
adecuado para realizar actividades en diversas comunidades, como también en instituciones
educativas.
“Iniciativas como estas permiten a los
estudiantes aplicar estos principios en proyectos reales, mientras benefician a
comunidades vulnerables. Solo el año pasado, esta iniciativa logró beneficiar a
más de 5,200 personas en diversas zonas de Lima, Trujillo y Cajamarca. El
desafío ahora es trasladar estas experiencias a una mayor escala y hacer de la
arquitectura una herramienta clave en la lucha contra el cambio climático.”, concluyó Dreifuss.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario